Aunque contento con la victoria, que le permite mantenerse en la lucha, Manu Santos, técnico del CEV 2017 reconocía que su equipo, en la segunda parte, no había estado acertado. "El Tarragona fue mucho más físico y nosotros nos estuvimos acertados ni en defensa ni en ataque, eso les permitió verse en el partido y pelearlo hasta el final", explica Santos. En esa segunda parte, el equipo "no tuvo la solidez defensiva necesaria y no estuvimos acertados en el rebote, lo que les permitía generar acciones con las que nos castigaron mucho". Santos prefiere centrarse ahora en el próximo encuentro, donde se van a medir al exigente Navarra, uno de los equipos más complicados que quedan hasta el final de liga.