No ha podido tener una mejor guinda el partido centenario del Xuven en LEB Plata. El Sammic Azpeitia, que llegaba a O Pombal con el traje de líder, se topó con un equipo en toda la expresión de la palabra que hizo de la solidez de su defensa el punto de partida para un triunfo con mucho mensaje implícito.

Hubo que ponerse el mono de faena desde la primera acción. Los de Manu Santos sabían que había que igualar el poderío físico de los vascos para poder competir. Tan solo la presencia de Karena bajo tableros ya obligaba a un esfuerzo extra. Por ello el Xuven llevó el partido a un ritmo de 28 metros en cada defensa. Desde la presión inicial al balón hasta la consecución del rebote para permanecer siempre por delante en el marcador.

Todas las rotaciones amarillas funcionaban y el equipo alcanzó el cénit de su juego durante el segundo cuarto hasta tener una renta de 39-23. Los vascos no eran capaces de encontrar el camino al aro local hasta que en los dos últimos minutos, con Ánder García al frente, pudieron cambiar sus sensaciones a la llegada del descanso.

La dinámica de tirones en el marcador de los cambadeses se mantuvo en el tercer cuarto con un 49-34 como máxima renta, pero estaba claro que era un partido de martillo y cincel. El ex Xuven Ánder García aparecía una y otra vez para enjugar las distancias con canastas de todos los colores. Tal era el empeño del escolta guipuzcoano que fue clave en el 67-63 que campeaba a falta de poco más de tres minutos.

El Cambados Cidade Europea do Viño 2017 se mantuvo sobrio en los momentos comprometidos. No dio un paso atrás en el intento de intimidación del líder para poder finiquitar una victoria para la que había hecho más méritos y que Erik Quintela apuntilló ya dentro del último minuto. Ahora a un partido de distancia del ascenso a LEB Oro y diez partidos de liga regular por delante para seguir gozando.