"Partido muy trabado. Mucha tensión, mucha emoción en el juego. Eso nos perjudicó en ataque. Nos salvó hoy nuestro nivel defensivo. Mentalmente hemos estado fuertes para seguir defendiendo cuando el ataque no salía bien. Nos hemos hecho fuertes atrás y en el rebote y eso nos dio la vida". Estas eran las primeras palabras de Manu Santos para valorar el triunfo.

Acerca de la acertada decisión de jugar con tres pívots en pista, "jugar con tres grandes y buscar las ventajas con Charles nos ayudó a ir anotando, algo que nos costó mucho por el nivel de tensión que tenían los jugadores. No estábamos lo suficientemente calmados para tomar buenas decisiones y anotar cuando eran situaciones muy asequibles para hacerlo".