Alicientes de todo tipo rodean el duelo del domingo en A Lomba. El Silva es el rival ante el cual el Arosa tratará de salir del pequeño bache por el que atraviesa y que le ha llevado a ganar únicamente un partido de los cinco últimos disputados.
Además el equipo coruñés supone una seria amenaza al estatus clasificatorio de los vilagarcianos. La escasa distancia de un punto que media entre ambos es la muestra más evidente, pero a ello hay que añadir la trayectoria al alza que está protagonizando el equipo dirigido por Javi Bardanca.
Y es que lo realizado por el Silva en los dos últimos meses es digno de todo elogio. En el periplo que comprende los últimos nueve encuentros, el próximo rival del Arosa solo ha perdido un encuentro. Una derrota que llegó en el feudo de un Dubra intratable como local.
Al aspecto cuantitativo en la tarjeta de resultados positivos hay que añadirle la dificultad de los rivales que le han salido al paso, especialmente después de su tropiezo en el Jesús Baleato. En el último mes de competición, los coruñeses han sido capaces de superar en su campo de A Grela al Compostela (2-1) y al Vilalbés (1-0) además de empatar con el Barco (1-1). Su único desplazamiento reciente ha sido a Carballo para empatar ante el Bergantiños (1-1).
Para el Arosa otra de las motivaciones añadidas será el tratar de salir de la mala racha que atraviesa y que le ha llevado a no materializar ni un solo gol en los dos últimos partidos. Lo positivo en este sentido será la posibilidad para Jorge Otero de contar con Alberto Cabanyes, cuyo problema en la muñeca tras el partido en Dubra se ha quedado en un esguince.
