El inicio de la Tercera División para los equipos de O Salnés parece esperanzador, ya que de las cuatro escuadras que militan en la categoría, tres consiguieron triunfos solventes. Tan solo el Villalonga cayó derrotado en su debú ante un Racing Vilalbés llamado a estar en la zona noble de la clasificación.

El triunfo de mayor mérito fue el del Arosa, que consiguió pescar tres puntos en el complicado campo de Santa Mariña, donde el Choco forjó, en las dos campañas anteriores, su clasificación para los play off de ascenso.

Jorge Otero, que se estrenaba en competición oficial como técnico arlequinado, se mostraba ayer contento por la victoria, y sobre todo, por el trabajo que realizaron sus pupilos para conseguir los tres puntos. "Fuimos capaces de hacernos con el dominio del partido en la primera parte ante un rival muy competente, e incluso, pudimos cerrarlo mucho antes, porque llegábamos al área contraria con claridad", explica el técnico arlequinado.

Tan solo a raíz de la expulsión de Vitra y del gol local, los arlequinados dieron "un paso atrás, pero el equipo trabajó muy bien y se acercó a lo que estamos buscando, aunque todavía queda mucho que trabajar y mejorar para alcanzar el nivel que debemos dar".

El Céltiga comenzó el nuevo curso con una victoria en la que ofreció momentos de buen fútbol, especialmente en los primeros veinte minutos de la primera parte, donde encerró al As Pontes en su área. A los isleños les faltó efectividad ante la meta contraria para cerrar el partido, algo que no consiguieron hasta el descuento.

Algo similar vivió el Ribadumia, que superó por la mínima al Dubra, manteniéndose fiel al estilo que marcó Sierra desde su llegada el pasado año.

El Villalonga sufrió en sus carnes la calidad que atesora la delantera de un Racing Vilalbés que castigó en exceso los errores celestes.