Las duras condiciones de viento y agua se cobraron varios daños en el barco del Paz Sailing Team. Ya en la primera manga la rotura de los trapecios obligo a un sobreesfuerzo considerable. "Ya saliendo tuvimos el problema y tuvimos un trabajo muy duro en el agua para poder completar la primera manga. Incluso fuimos capaces de remontar y hacer un octavo puesto que nos supo muy bien", señaló Carlos Paz.

En la tercera y última manga la rotura afectó en esta ocasión a una cruceta, "tuvimos que completar la regata con ese problema. Luego estuvimos más de tres horas arreglando todo en el puerto. Por lo menos quedó todo listo para seguir compitiendo".

El espaldarazo más importante para la confianza de los vilagarcianos fue el primer puesto obtenido en la segunda regata. "Hicimos una buena salida y una buena primera ceñida. Logramos tomar barlovento segundos y en la popa superamos a la tripulación alemana para mantener el liderato hasta la llegada", señaló el patrón.

Incluso en la tercera manga el octavo puesto estuvo cerca de convertirse en un quinto, "no elegimos bien el lado de la primera ceñida. Fuimos remontando y nos faltó muy poco para poder hacer un quinto puesto".

A falta de nueve mangas para completar la fase de clasificación, los hermanos Paz son conscientes de lo mucho que queda por delante. La presencia en Holanda del entrenador Bruno Gago y de su padre, Álvaro Paz, está siendo de muy buena ayuda para los intereses de Carlos y Antón.