- Los 100 goles a favor parecen hablar de un estilo.

- Planificamos la plantilla para tener mucha gente por detrás del balón con capacidad para golear. Tanto es así que nuestro máximo realizador es un interior. En diciembre nos reforzamos con Rubén Rial que hizo catorce goles solo en la segunda vuelta.

- ¿Es esta la primera piedra de una reconstrucción del fútbol de Cambados?

- Creo que sí. La intención de la directiva es esa. Me sentí responsabilizado cuando me llamaron. Tenía otras cosas pero mi ilusión era entrenar en Cambados. Me embarqué porque sabía que iba a estar muy cómodo. Sobre todo queremos recuperar la masa social y este año hubo entradas en Burgáns de Preferente o incluso de Tercera. La idea es seguir poniendo piedras pero sin urgencias. Recuperar a la afición fue muy importante.