El pabellón de Amorebieta será el sábado (20 horas) el lugar donde se decida el futuro deportivo del Xuven esta temporada. Como anfitrión espera un Zornortza que no se puede andar con remilgos puesto que necesita ganar para conseguir la última plaza del play-off que aún no tiene dueño. Pero es que además del triunfo, y al igual del Xuven en lo que respecta a la novena posición, también necesita una derrota del Clínicas Rincón en la cancha del Marín Peixe Galego.

Sin embargo las consecuencias de una derrota serían mucho más negativas en el caso de los cambadeses, que podrían caer a zona de descenso si su tropiezo ante el conjunto vasco se conjuga con una victoria del Valladolid y una derrota del Simply Olivar. Y es que cualquier empate, doble o triple, con el conjunto maño sería perjudicial para los intereses de los arousanos.

El azaroso destino ha vuelto a cruzar los caminos de Zornotza y Xuven una temporada más. Si bien el pasado curso la felicidad era mútua por medirse en la primera eliminatoria de play-off de sus respectivas historias, la tesitura de este año es mucho menos agradable. Incluso dos jugadores con pasado amarillo se ven inmersos en una situación ambivalente.

Uno de esos casos es el de Charles Nkaloulou. Su paso la pasada temporada por el Xuven le sirvió para revalorizarse. Estaba encantado en Cambados, pero la oferta llegada desde Amorebieta resultaba irrechazable. "Hice muchos y muy buenos amigos allí. Además coincidí con los hermanos Quintela que para mí son como mi familia. Fue un año muy bonito y es un club al que siempre le desearé cosas buenas".

Su participación en el decisivo partido del sábado todavía está en el alero. Una fisura en un dedo del pie, unida a una fascitis, le está dando muchos quebraderos de cabeza. En la tarde de ayer, el pívot congoleño apuntaba que "no sé si llegaré al partido. Acabo de salir del fisio, pero vamos a ver como evoluciona la cosa en las próximas jornadas. La verdad es que tengo muchas ganas de jugar".

Perfecto conocedor de la situación de peligro por la que atraviesan los cambadeses, el propio Charles incluso se mostraba apesadumbrado, "es una pena que se de una última jornada así. Solo espero que Valladolid no gane porque así el Xuven ya no bajaría si le ganamos. Yo no quiero ver descender al Xuven".

La motivación en Amorebieta de cara al choque es algo que no oculta Charles, "el equipo está muy motivado. Queremos jugar el play-off porque fue una temporada muy difícil. Tuvimos muchas lesiones y no esperábamos llegar con todo por jugarse a la última jornada". Incluso deja claro el ex jugador del Xuven que "nuestra idea era la de estar mucho más arriba. A principio de temporada hablábamos de estar entre los tres primeros, pero todo eso se quedó en agua de borrajas".

Tampoco se le olvida a Charles Nkaloulou que las opciones de cara al partido están muy divididas, "nosotros jugamos en casa, pero el Xuven también tiene muy buen equipo. Han mejorado muchísimo con la llegada de Shota y no va a ser nada fácil superarles. Nosotros seguimos con algunos jugadores tocados y a ver como sale todo. Pero no va a ser fácil".