El Rasoeiro volvió a mostrar que no está dispuesto a tirar la toalla a la hora de pelear por hacer algo grande esta temporada. En Viveiro tenía la oportunidad de lograr su undécima victoria del curso y no la desaprovechó y todo pese a las importantes ausencias con las que tuvo que afrontar el duelo.

La mala posición en la tabla de los lucenses quizá invitase a pensar en un camino más plácido para los de Quito Parada, pero lo cierto es que hubo que esperar a la segunda parte para sentenciar el choque.

Aunque con facilidades para anotar durante los sesenta minutos, no fue hasta que el Rasoeiro se puso serio en defensa cuando el partido empezó a inclinarse a su favor. De ese modo tuvieron un final sin más apuros de los esperados.