Las aguas de Clearwater deciden esta tarde el futuro de la carrera olímpica de Carlos y Antón Paz. El segundo Mundial en apenas cuatro meses se convertirá en el escenario sobre el que se va a elegir cual de los tres barcos aspirantes es el que va a representar a España en los Juegos Olímpicos de Río del próximo verano.

De partida, las posibilidades de la tripulación vilagarciana están notablemente condicionadas. El sistema de puntuación establecido les obliga no solo a rozar la perfección, sino también a que la suerte no esté del lado de sus rivales por la plaza olímpica. Los hermanos Alonso, tras su cuarta plaza en el Mundial de Argentina, parten con ventaja, pero también Diego Botín y Iago López, novenos en Buenos Aires, parten con más puntos que un Paz Sailing Team que concluyó en el puesto número trece.

Desde esta tarde y hasta el próximo sábado se disputarán las mangas clasificatorias para la Medal Race. En cada una de ellas puntuarán los tres primeros clasificados y serán los cinco primeros los que puntúen en la fase final con la obligatoriedad de que se finalice entre los ocho primeros del Mundial para que esta puntuación tenga valor. También se otorgarán puntos en función del puesto definitivo en la clasificación final para obtener el montante total que decidirá el nombre de la futura tripulación olímpica de 49er.

Antón Paz deja claro que "tenemos obligatoriamente que estar entre los ocho primeros porque si ningún barco español lo logra, serán los hermanos Alonso los que consigan la plaza". Para el vilagarciano no existen más objetivos que el de ir día a día. "Vamos a ver si estamos inspirados porque nuestra idea pasa por estar peleando hasta el final. Está complicado, pero estamos acostumbrados a remontar en muchos campeonatos", argumentan.

La última semana ha servido de entrenamientos en una bahía que la tripulación vilagarciana compara con la Ría de Arousa en cuanto a condiciones de navegación pues "hay frentes continuamente que van entrando y los vientos que van girando. Hay situaciones de todo tipo y eso nos puede ir muy bien. Los Alonso van muy bien con viento ligero y Botín y López más bien al revés porque con poco viento y olas pueden sufrir".

La puesta en escena del material nuevo le dará un plus de velocidad a la tripulación vilagarciana. En los días previos han estado entrenando para ganar en sensaciones respecto a la competición y las conclusiones son muy positivas. Añade Antón Paz que "la presión la tienen ahora los Alonso. Nosotros nos sentimos cómodos viniendo desde atrás".

A las 18 horas comenzará el último paso de los vilagarcianos en su carrera por estar en Río.