Los finales apretados no favorecen al Cortegada. Al igual que la semana pasada en Pontevedra, las vilagarcianas volvieron a caer tan solo por tres puntos de diferencia en el electrónico. El equipo de Rubén Domínguez llegó empatado al final de encuentro, pero dos malas elecciones de tiro y las faltas personales posteriores, favorecieron a las vascas, que desde el tiro libre consiguieron llevarse la victoria. Pese a la derrota, el equipo vilagarciano arrancó muy bien el encuentro, poniéndose muy pronto por delante en el marcador, aunque con ventajas muy pequeñas, ya que el encuentro se presentaba muy igualado.

Esa igualdad se confirmó en el segundo cuarto, donde la intensidad defensiva de ambos conjuntos dejó al Cortegada tan solo cuatro puntos por delante en el marcador al descanso.

El acierto anotador de las vascas mejoró tras el descanso, lo que les permitió colocarse por delante en el electrónico. En el último cuarto se registraron constantes alternancias en el marcador hasta que, en los instantes finales, las vilagarcianas acusaron el cansancio y las vascas estuvieron más acertadas en el tiro. El rebote también ayudó a la victoria de las visitantes, ya que el GDKO atrapó 35 balones, de los cuales 13 fueron en la parcela ofensiva, mientras que el Cortegada se hizo con 29 balones, tan solo seis de ellos los cogieron las jugadoras vilagarcianas en posiciones de ataque.