Un triple empate a 45 puntos con Dorneda y Negreira manda, después de nueve años, al Villalonga de regreso a la Preferente. Los vecinos de Vilalonga se volcaron con el equipo, encontrándose los jugadores en su salida al campo con numerosas pancartas de ánimo para conseguir los tres puntos necesarios ante el Barbadás y esperar el fallo de uno de sus dos rivales directos en la lucha por la permanencia. Los celestes tenían que ganar su encuentro y lo hicieron con solvencia, recuperándose del mazazo que supuso el empate del Barbadás. Durante muchos minutos, el sueño de mantenerse en la Tercera División se mantuvo vivo, sobre todo, porque el Negreira era incapaz de perforar la meta del Cerceda. Sin embargo, el Negreira conseguiría marcar un tanto que significaba su permanencia y condenaba al Villalonga. Fueron solo unos minutos, ya que el Ordes empataba en el campo del Dorneda y devolvía la ilusión a los celestes. Finalmente, cuando los partidos entraban en su recta final, el Dorneda conseguía anotar un segundo tanto que suponía para los celestes la condena del regreso a Preferente después de nueve temporadas. Las caras de jugadores, cuerpo técnico y directiva eran todo un poema en San Pedro tras corroborar los resultados que llevan al Villalonga a Preferente pese a hacer una puntuación que, en condiciones normales, permitiría a un equipo continuar en la categoría.
