El Sanxenxo sigue dependiendo de sí mismo para volver a tercera división gracias a una agónica victoria ante un Unión Grove que no mereció tanto castigo, ni de resultado ni de criterio arbitral. Y es que cuatro jugadores locales y dos miembros del cuerpo técnico local fueron expulsados, incluso llegaron al descanso con 1-0 y solo nueve jugadores. Los de Óscar García remontaron con dos goles en el descuento.