Ya no hay tiempo para mirar atrás y añorar todo lo que se ha quedado en el camino. Villalonga y Pontevedra tienen una de esas tardes en las que solo pueden mirar hacia adelante. El equipo celeste y el granate se verán las caras en San Pedro a partir de las 17,30 horas con objetivos totalmente contrapuestos.

La necesidad de los de Julián Ferreiro nada tiene que ver con la altura de miras del Pontevedra, pendiente de dar caza al Compostela en la cuarta plaza y del que le separan cuatro puntos. Para el Villalonga los puntos son vitales en su persecución de la permanencia. El técnico señaló que "estamos en clara progresión. En los últimos diez partidos hemos conseguido quince puntos. Eso nos ha servido para pasar a depender de nosotros mismos y es una baza que trataremos de explotar".

Una cuestión que también juega en favor de los intereses locales es, según Ferreiro, el buen estado de ánimo del colectivo de futbolistas. La clave de todo ello está "en que incluso en los partidos que perdimos terminamos con la sensación de que estuvimos más cerca de empatarlos o de ganarlos. Eso ha hecho que el equipo fuese creciendo y creyendo cada vez más en lo que hacía".

Otra cuestión que también entra en juego es la relativa al excelente momento de resultados por el que atraviesa el Pontevedra. Los de Milo Abelleira buscarán en San Pedro su decimotercera jornada consecutiva sin perder, crecidos además después de superar el pasado domingo al Rácing de Ferrol, ya campeón de la categoría.

Ferreiro entiende además que esa necesidad con la que llegarán los de Pasarón puede generarles cierta ansiedad, "ellos tienen que ganar si quieren seguir con opciones. A nosotros, incluso un punto, podría ser muy positivo en función de los resultados de rivales directos. De todos modos, entiendo que saldrán a ganar el partido sin ningún suicidio, aunque si las cosas se les ponen en contra todo puede cambiar".

El estado de salud de Machu y Saúl continúa sin dar síntomas de excesiva mejora. El delantero cambadés parece contar con más probabilidades de jugar que el capitán, pero el técnico prefiere no lanzar las campanas al vuelo, "Machu ha mejorado más, pero tampoco es segura su presencia. Lo de Saúl parece más complicado. No mejora de su dolencia en las costillas y ampliaremos los plazos hasta el último momento".

La convocatoria para esta tarde se realizará en los propios prolegómenos del encuentro, "tengo claro que vamos a poder contar con un equipo competitivo. Sacaremos el once que en mejores condiciones esté de pelear por el partido".

Con 39 puntos en su casillero, y con nueve por disputarse, el Villalonga confía en poder terminar la jornada dependiendo de sí mismos, "no podemos parar a pensarnos en los puntos que nos hacen falta. La idea es la de mantenerse con vida. Si conseguimos la permanencia será con mucho sufrimiento y en la última jornada", concluyó Ferreiro.