El Cambados dejó escapar una nueva oportunidad de salir a la superficie de la clasificación. Su derrota en Salvaterra le devuelve a posiciones de descenso directo después de noventa minutos marcados nuevamente por un cúmulo de despropósitos de los amarillos.

La mayor necesidad de los visitantes se dejó notar en su intensidad en los primeros minutos. Incluso fue el Cambados el que tomó la delantera en el marcador. Julio robó un balón en tres cuartos de campo y, tras combinar con Caldas, conectó un remate que sorprendió por alto al portero del Salvaterra.

A partir de entonces entró en juego un criterio arbitral que desesperó a los arousanos que reclamaron dos penas máximas. La mala suerte se concretó con el tanto del empate en la última acción de la primera parte con un cabezazo de López.

El colmo llegaría con la acción del segundo tanto de los locales. Un saque de banda en campo ofensivo se convirtió en una contra que Sáez, en su intento de despeje, terminó introduciendo el esférico en la portería de Vivar en lo que fue el 2-1 que a la postre sería definitivo.

Las protestas arrebataron el protagonismo al juego en los últimos minutos ante la impotencia de ver como se escapaban tres importantes puntos. La visita del Porriño, actual líder, a Burgáns aumentaba el valor de lo que ayer sucedió, pero la irregularidad volvió a aparecer.