Rafael Nadal señaló tras colocarse en las semifinales de Roland Garros con facilidad, que no hay que derrochar energía a la vez que echó de menos a David Ferrer en esa ronda, y pronosticó un partido "igualadillo" entre el suizo Roger Federer y el argentino David Nalbandian. "Llevo mucho tiempo en la pista", dijo Nadal al recordar los largos encuentros diputados anteriormente. "Cuando lo he necesitado sí que me he animado. Tampoco hay por qué derrochar energía, lo he ido viendo a medida que han ido pasando los años. Los saltos en este tipo de partidos al final pueden ser perjudiciales. Hay que saber medirlos y controlarse. Un poquito de tensión es buena, igual que el año pasado aquí. Yo estaba más nervioso el año pasado que éste". Nadal resumió que su partido contra Djokovic, salvo un instante de desconcentración fue aceptable. "He estado jugando bastante bien, hasta los problemas de Djokovic que me han despistado mucho, especialmente con mi servicio porque no entendía lo que estaba pasando. Es un fallo mío. Pero al ser un partido corto, mejor", dijo. "Prefiero ganar en tres sets, es una pena que él tuviera que retirarse, pero ya estaba bastante encarrilado, dos sets a cero 15-30. Creo que he hecho un buen partido hasta que me he liado y será positivo para las semifinales".