La etapa reina de la Volvo Ocean Race han sido casi 22 días en los que la tripulación del MAPFRE se ha enfrentando a las condiciones más desafiantes de las últimas cuatro ediciones de la vuelta al mundo a vela.

Frío intenso, calor, incesantes rociones de agua salada, temperatura del agua a 3ºC, comida liofilizada, jornadas seguidas sin dormir, sin ducharse, piel descamada, granos... La vela oceánica es una maratón en la que la rueda gira y gira y no puedes parar hasta que no cruces la línea de llegada.

La tripulación del MAPFRE fue retratada por la fotógrafa María Muiña el día de la salida de Auckland y el día de la llegada a Itajaí. En sus rostros puede contemplarse la dureza de la etapa.