El Areosa sigue vivo, aunque ahora depende de los resultados del Alondras para salvar la categoría. Los de O Morrazo solo necesitan un punto en los dos partidos que les restan por disputar.
El Areosa llevó el peso del encuentro, disponiendo de varias ocasiones e incluso una pena máxima. Ese paso al frente lo aprovecharon los granates para recuperar un balón y adelantarse. Un duro golpe.
En la segunda parte la situación no cambió. Los vigueses refrescaron la línea de creación con Cruz y Samu pero los numerosos fallos ante la meta rival comenzaron a pesar como una losa.
En el minuto 52 llegaba la expulsión del granate Tabares, y a partir de ese momento el Pontevedra trató de ralentizar lo máximo posible el juego. El Areosa obtuvo su recompensa a un minuto para la conclusión, cuando Lafu aprovechó un balón al área.
