El ertzaina fallecido este jueves en Bilbao al sufrir un ataque al corazón mientras trabajaba controlando los altercados entre ultras del Athletic y del Spartak de Moscú, Inocencio Alonso García, de 50 años, casado y con dos hijos y nacido en Ermua, es hijo de un ourensano y una sanabresa. En concreto, su padre es de A Canda. Los progenitores son, pues, emigrantes en el País Vasco, aunque muy ligados a Galicia y Zamora. Su madre procede de Las Hedradas, una pedanía de Lubián, donde el fallecido solía veranear.En Las Hedradas han sentido un fuerte impacto por la noticia, ya que tenían la mejor opinión del policía, que era "una buena persona" y acudía cada vez que podía.

Además, Inocencio Arias era amigo de la familia de Miguel Ángel Blanco, el concejal de Ermua hijo de gallegos asesinado por terroristas de ETA en 1997. La madre de Blanco, Consuelo Garrido, se pronuncia de forma contundente contra la violencia en el fútbol, tras la muerte del ertzaina: "Para hacer esto, lo que están haciendo, es mejor que se termine el fútbol. Si el fútbol es para pelearse y para matarse, el fútbol no hace falta. El fútbol hace falta para divertirse, pero para lo demás no".

El ertzaina Inocencio Alonso pertenecía al "grupo" o "cuadrilla" de bicis de Ermua y Eibar, en el que también está integrado Delfín Garrido, hermano de la madre de Miguel Ángel Blanco. "Realizan recorridos de hasta 200 kilómetros por carreteras comarcales y cenaban juntos. Todavía los recuerdo, pasando por delante de mi casa", indica Consuelo Garrido. "Una vez llegaron hasta Burgos", agrega.

Delfín Garrido trabajaba como mecánico en la Seat de Eibar. Reside en Salvatierra (Vitoria). "Cada vez que el grupo ciclista organizaba un recorrido, mi hermano venía a Ermua para salir con ellos. Mi hijo, Miguel Ángel Blanco, era un poquito más joven que el ertzaina fallecido; tenía año y medio o dos años menos".

Aunque Alonso no recibió ningún golpe antes de su infarto, los sindicatos denuncian que llevaba trece horas seguidas trabajando cuando se produjo su muerte.

Las nueve personas detenidas como consecuencia de los incidentes de San Mamés continuaban ayer en dependencias policiales. Son numerosas las reclamaciones a la UEFA para que toma medidas. El temor se acentúa porque el Lokomotiv ruso y el Olympique de Marsella francés serán los rivales de Atlético de Madrid y Athletic Club en los octavos de final de la Liga Europa, según ha deparado el sorteo celebrado ayer en Nyon, y ambos tienen grupos de seguidores con un historial de violencia.