Carlos Sainz (Peugeot) superó ayer otra dura jornada al finalizar tercero la undécima etapa del rally Dakar y, a falta de tres días para el final de la prueba, acaricia el título. La mejor noticia para "El Matador" llegó tras cruzar la meta al conocer que los comisarios decidieron quitarle la penalización de 10 minutos que le impusieron el lunes tras la apelación de su equipo.

"Los comisarios han llegado a la conclusión de que el episodio es un lance de carrera", informó en un comunicado la instancia disciplinaria de la prueba.

La sanción se quedó finalmente en una advertencia para que "preste más atención a los adelantamientos" en el futuro.

El cuerpo disciplinario del rally se reunió el lunes después de una queja del holandés Kees Koolen (Maxxis Super B Dakarteam), quien acusó a Sainz de haberlo golpeado y no haberse detenido.

El incidente ocurrió "aproximadamente" en el km 184 alrededor de San Juan de Marcona, Perú, según el fallo, y Sainz fue penalizado por su "comportamiento potencialmente peligroso", una decisión que Peugeot apeló inmediatamente.

"Agradecemos a los comisarios haberse tomado el tiempo de profundizar en la cuestión con elementos que les dimos y otros elementos que pudieron conseguir", declaró Bruno Famin, jefe del equipo Peugeot. "El comportamiento de Carlos fue ejemplar en esa situación, los datos lo demuestran", prosiguió.

Sainz, que le sacó 10 segundos al francés Stéphane Peterhansel, su máximo perseguidor, cuenta ahora con una ventaja de 1 hora y 45 segundos sobre él. La victoria de etapa, entre las ciudades argentinas de Belén y Chilecito, fue para el holandés Bernhard Ten Brinke (Toyota), quien completó los 280 km de especial cronometrada en 4 horas 10 minutos y 54 segundos, por delante del francés Cyril Despres (Peugeot, a 4 min 35 seg) y de Sainz (a 4 min 40 seg).

Sainz recordó que tiene "el pelo un poco blanco" y lleva "unos cuantos rallys" a su espalda al término de la undécima jornada de competición en el Rally Dakar y aseguró que no está nervioso por afrontar las últimas jornadas con más de una hora de ventaja sobre el segundo clasificado, el francés Stéphane Peterhansel.

"Fiambalá es una de las etapas clásicas de este rally donde siempre han pasado cosas, así que estoy muy contento de haberla dejado atrás. Sinceramente, la idea era haber acabado detrás de Stéphane para salir detrás de él, pero bueno", reconoció.