Eduardo Berizzo ha dejado de ser entrenador del Sevilla. El consejo de administración del equipo andaluz decidió esta tarde destituir al técnico argentino a quien no ha perdonado la regular imagen que el club ha dado en los últimos partidos pese a que sigue a adelante en las tres competiciones (quinto en la Liga, en octavos de final de la Liga de Campeones y en octavos de la Copa del Rey donde le espera el Cádiz).

Tampoco ha demostrado la mínima compasión el consejo de administración del Sevilla con la situación personal del argentino que lucha para superar un cáncer de próstata que se le diagnosticó hace pocas semanas y del que ha sido intervenido con éxito. De hecho, hace una semana Berizzo se incorporó a la actividad en el banquillo aunque fuese a costa de cruzar España en tren para acompañar el equipo en San Sebastián debido a que los médicos le prohibían subir a un avión.

Berizzo llegó a Sevilla procedente del Celta donde había estado tres temporadas inolvidables para el equipo vigués. Tras romper con el cuadro gallego aceptó la propuesta del conjunto andaluz, al que la paciencia se le ha acabado muy pronto. Apenas cinco meses ha aguantado a un técnico que contrató por tres temporadas. Desde el comienzo un importante sector de la afición se puso en su contra. A eso se unieron las críticas del entorno y de una parte del consejo de administración. Eso, sumado, al escaso rendimiento de algunos de los fichajes y el regular juego del equipo ha dado como resultado el adiós a Berizzo.