El entrenador del Villarreal, Javier Calleja, señaló como clave el momento de la expulsión de Raba por una entrada a Busquets que no le pareció de "roja" en el duelo de ayer ante el FC Barcelona, donde tenían al rival controlado hasta ese minuto 60 en el que se quedaron con uno menos, para irse sin "recompensa" de un buen partido. "Estamos disgustados porque hemos conseguido hacer un buen partido y la recompensa no ha sido la que creo podíamos haber conseguido en el supuesto de que hubiésemos jugado 11 contra 11", afirmó en declaraciones a Movistar Plus, tras el duelo de la jornada 15 de LaLiga Santander, en el Estadio de la Cerámica. El técnico local se centró en esa acción y aseguró que el árbitro no hubiera tenido la misma contundencia para expulsar a un jugador del Barça. " En el campo no me ha parecido roja, me ha parecido que llega tarde, pero lo que hubiera pasado si la entrada fuera al revés es que no hay expulsión. Es una entrada dura pero no sé si merecedora de roja", apuntó.