El fútbol de Segunda División B en Vigo no cesa a pesar del fuerte temporal de viento y lluvia y la alerta roja decretada por AEMET a partir de las 18.00 horas. Los partidos del Celta B y el Rápido de Bouzas han sido los únicos partidos de fútbol que se han jugado en la ciudad por la tarde. Ayer, la Federación Galega de Fútbol (FGF) suspendió todos los partidos que estaban bajo su responsabilidad, es decir, desde Preferente hacia abajo, incluidas las categorías de fútbol base. También hubiese afectado a la Tercera División, pero este fin de semana no había jornada prevista en el calendario.

El partido en el Baltasar Pujales entre el Rápido de Bouzas y el Talavera empezó puntual a las 16.45 horas. Las condiciones del campo no eran las idóneas para la práctica del deporte pero el colegiado, que hizo una última inspección un cuarto de hora antes del inicio, apostó por celebrar el encuentro. Las imágenes compartidas por el Talavera en sus redes sociales muestran el campo completamente encharcado, especialmente en sus márgenes laterales. En lo deportivo, el Rápido de Bouzas terminó cediendo un empate (1-1). David Eugenio marcó en la primera mitad para los aurinegros y Jesús Jiménez igualó el marcador tras la reanudación.

El Barreiro también se jugó al fútbol. Celta B y Navalcarnero disputaron su correspondiente partido en medio de unas condiciones muy difíciles. El club celeste informó que ambos equipos necesitaron adaptar su estilo y abusar de los balones largos. Un gol tempranero de Dennis Eckert decantó la contienda en favor de los celestes.

Por otro lado, el otro encuentro previsto para la esta tarde en Galicia del grupo primero de la Segunda División B se disputa en la provincia de A Coruña, donde la alerta ha llegado a nivel naranja, entre el Cerceda y el Deportivo B.