La futbolista compostelana Verónica Boquete y el exjugador histórico del Deportivo de La Coruña y del Real Madrid, Amancio Amaro, fueron los padrinos encargados de la inauguración de la renovada sede de la Real Federación Galega de Fútbol (RFGF) en el estadio de San Lázaro de Santiago, que cuenta con más de 2.000 metros cuadrados de superficie.

Al acto asistieron también el alcalde de la capital gallega, Martiño Noriega; el conselleiro de Educación, Cultura e Ordenación Universitaria, Román Rodríguez; el rector de la Universidade de Santiago de Compostela (USC), Juan Viaño; el presidente de la Federación Española de Fútbol, Juan Luis Larrea; el titular de la RFGF, Rafael Louzán; el exentrenador del Deportivo de La Coruña, Fernando Vázquez; y el exárbitro Raúl García de Loza.

La sede reabierta cuenta con instalaciones reformadas --oficinas, salas de formación de árbitros y salón de actos, entre otras-- que, junto a las inauguradas la pasada semana en Pontevedra, Vigo y A Coruña, forman parte del proyecto de renovación de la RFGF en todas sus oficinas.

Louzán agradeció al Ayuntamiento de Santiago la cesión de las instalaciones del estado de San Lázaro por 50 años y ha adelantado que "probablemente" la selección regional mantenga un encuentro amistoso en la capital gallega el próximo año. Tanto Boquete como Amancio agradecieron la deferencia de la FGF al contar con ellos para el acto de apertura.

Juan Luis Larrea ha valorado las nuevas oficinas como una "inversión", puesto que "no es un gasto". Además, ha pedido la contribución de la sociedad y, en especial, de los jóvenes, para la continuación del deporte, ya que, en su opinión, "se ha acabado el voluntariado en el fútbol base", al cual "solo van los padres y las novias".

Larrea, por cierto, mantiene abiera la posibilidad de que la selección española viaje a Galicia el próximo año a jugar un partido amistoso, tarea en la que se ha embarcado Rafael Louzán, decidido a que el partido sirva para recaudar dinero para los afectados por los incendios.