El VO65 Mapfre finalizó ayer la primera etapa de la Volvo Ocean Race en segunda posición. Encabezados por el campeón olímpico vasco Xabi Fernández, patrón, y con el catalán Joan Vila, los tripulantes del Mapfre se llevan la segunda plaza de una reñida etapa en la que no se han rendido en ningún momento y han mantenido la consistencia necesaria para remontar y no soltar su segundo puesto.

Las últimas millas del recorrido fueron una lenta agonía debido a la drástica caída del viento. Así fue desde la aproximación del ganador de la etapa a la costa portuguesa, que veía cómo su distancia con el Mapfre y el resto de la flota se reducía conforme se acercaban a la meta aunque sin nervios a bordo porque contaba con un buen colchón de millas.

De infarto sí que fue la llegada de Mapfre, segundo, y Dongfeng, tercero. Con una velocidad de unos cuatro nudos (7,3 km/h) a poco más media milla para la llegada, el barco apretaba los dientes mientras los de Charles Caudrelier avanzaban al doble de velocidad.

El Mapfre supo mantener la calma, con un sólido Pablo Arrarte al timón. Y tras unos desesperantes tres nudos de velocidad subía a cinco para finalmente cruzar la línea de llegada a las 18:42, hora española.

"Ha sido más duro de lo que esperaba. El estrecho y otras transiciones han sido muy duras, con muchas maniobras y casi sin poder descansar", confesaba la gallega Támara Echegoyen.