El Barcelona empató en el Metropolitano, pero además del punto consiguió que el uruguayo Luis Suárez recuperase las buenas sensaciones que no mostró en el inicio de curso.
El goleador charrúa parecía alejado de su verdadera imagen en un inicio de temporada en el que había reducido su pegada y la influencia demoledora en los últimos metros hasta que llegó un partido grande para rescatar al Barcelona. No marcaba desde el 23 de septiembre y a falta de goles dejaba trabajo en punta, movimientos para generar espacios a Leo Messi, hasta que castigó el error de la defensa del Atlético de Madrid y mandó a callar al Wanda Metropolitano como primer jugador visitante que marca en Liga.
Sobre la celebración de Suárez tras batir a Oblak, su compañero Jordi Alba explicó: "Hay muchas celebraciones, cada uno lo celebra como quiere. No voy a entrar en si está bien o mal, también hago cosas que están bien o mal. Si ha hecho eso habrá que preguntárselo a él, pero en ningún momento estamos enfadados con Luis. Nos ha dado un punto hoy y todo lo que sea hablar de Luis será muy bueno".
