Un nefasto arranque de partido condenó al Frigoríficos del Morrazo a sumar una nueva derrota en la que es una de sus canchas malditas de la Liga Asobal: el Palau d'Esports de Granollers. El conjunto cangués allanó con sus errores el camino a un cuadro vallesano que literalmente le pasó por encima y que no le dio opción alguna de pelear por la victoria.

El peor de los panoramas posibles fue el que se le planteó al equipo que dirige Víctor García, "Pillo". El de un Cangas errático en ataque, con demasiadas pérdidas de balón, y el de un Granollers cómodo a la carrera y anotando con mucha facilidad. Apenas habían transcurrido cinco minutos y el técnico pontevedrés ya había solicitado tiempo muerto para tratar de detener la sangría (5-1), pero sus palabras no consiguieron enderezar el rumbo del partido para los visitantes. La escuadra vallesana continuó mostrándose infalible en el tiro y, bien a través de contragolpes, bien encontrando a un excelso Adriá Figueras en la línea de seis metros, aumentaba su renta.

Pillo cambió de portero a los diez minutos -Salazar no detuvo un solo balón- con 11-4 en el electrónico y la entrada de Hermones pareció revitalizar un tanto a los suyos o al menos frenar la caída libre El joven David Iglesias sostuvo a los suyos en ataque, pero las diferencias se mantenían en los 6-7 goles. Muratovic, con una acción de contragolpe acortó el marcador (17-12), pero dos goles de los locales ampliaron la renta al descanso (19-12).

Dos contragolpes seguidos culminados por Resina -máximo goleador con 12 tantos- y Álvaro Cabanas obligaron a Pillo a parar el encuentro (min. 48) con una desventaja de nueve tantos (30-21) que resultó insalvable. El Fraikin llegó a tener 11 tantos de ventaja en los últimos minutos y terminó el encuentro con diez (36-26).