No pudo ser. Tirán Pereira vivió un mal sueño en la segunda jornada de la Bandera de La Concha y se estrelló contra unas terribles condiciones de la mar en el día de mayor gloria para Orio Babyauto, que se alzó con el título tras un espectacular largo de vuelta en el que destrozó al gran favorito, Urdaibai.

Si la Mar do Con había brillado una semana antes con calma chicha para finalizar sexta, ayer no pudo repetir gesta. Y eso que las olas no asustaban a la tripulación de José Ángel Cambados, "Truco", deseosas de una regata más técnica en la que los vatios no fuesen tan determinantes. Sin embargo, en esas condiciones remar se convierte en una lotería y la moneda al aire salió cruz. La primera tanda fue la peor en viento (con rachas de 27-28 kilómetros por hora) y mar. Y la calle que le tocó, la 2, tampoco era la mejor.

San Juan, amparado en una de las mejores calles, salió con potencia, y pronto le metió 8 segundos a Ziérbena, mientras Tirán y La Donostiarra se quedaban descolgados a 15 segundos. Las olas castigaban a ambos, especialmente a unos moañeses que al paso por la isla sufrían de lo lindo, con un par de golpes de mar que dejaban casi clavado el bote. En la vuelta los moañeses mejoraron su rendimiento, especialmente en el tramo final, el de menor violencia de las aguas, y lograron recortar 20 segundos, insuficientes, no obstante, para evitar su caída al último lugar.

La tanda de honor reservaba lo mejor. Con menos viento, pero con igual influencia de las calles, Hondarribia -situada en la peor- hipotecó muy pronto sus opciones de recortar los cuatro segundos de desventaja que traía con Urdaibai. Era Orio, no obstante, quien quería poner las cosas difíciles a los de Bermeo, aunque la igualdad era máxima entre ambos incluso al paso por la ciaboga. Pero con tanta ola las diferencias se pueden abrir con facilidad. Un par de ellas permitieron a los aguiluchos abrir hueco con 8 segundos -necesitaban diez para superar a su rival- y a partir de ahí se lanzaron a por todas en un espectacular largo en el que le metieron 24 segundos a los vizcaínos para volver a lo más alto de La Concha.

En la prueba femenina también hubo vuelco. San Juan se adaptó mejor a las condiciones y recuperó la desventaja con Hibaika. Mecos, en una regata muy meritoria, finalizó tercera.