Un fuerte dolor de espalda ha obligado al triatleta tudense Gustavo Rodríguez a retirarse en el prestigioso triatlón de larga distancia Embrunman, un Ironman que se distupa en Los Alpes y en el que el triatleta, que afrontaba su tercera participación en la cita, fue tercero el pasado año.

Pero unas molestias en la espalda le han obligado a abandonar una prueba que ha preparado a conciencia y en la que confiaba en sacar un buen resultado en esta ocasión. En el kilómetro 2 de la carrera a pie se vio obligado a parar. "Finalmente hoy (por ayer) no ha sido el día con el que soñaba. Triste y desilusionado por tener que abandonar una de las carreras que con más mimo y cariño he preparado", apuntaba el triatleta en su perfil en una red social ayer.

"Una molestia en la espalda los últimos 20-30 km de bici que pensaba remitiría al bajarme a correr... Pero finalmente no fue así, convirtiendo en un suplicio cada pisada", explicaba. "Ahora toca tirar para adelante y no malgastar tiempo ni energías lamentándose. Como ya dije el otro día, el camino ha merecido la pena independientemente del resultado", concluyó.

En la prueba, que constaba de 3.800 metros de natación, 190 de bicicleta (con la subida a la cima del Izoard incluida) y 42 kilómetros de carrera a pie, se impuso el español Marcel Zamora, que lograba su sexto triunfo en el Embrunman tras competir en solitario desde el kilómetro 35 de la bicicleta. Es el único deportista que suma seis victorias en esta exigente prueba alpina.