Sergio Llull, base y escolta del Real Madrid y de la selección española de baloncesto, con la que el miércoles se produjo la rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha, en un amistoso contra Bélgica disputado en Tenerife, regresó ayer a Madrid.

Llull, nacido en Mahón (Menorca) hace 29 años y una de las piezas claves de la selección española que afrontará a partir del último día de este mes (y hasta el 17 de septiembre) el Eurobasket -que él se perderá- llegó en compañía de Carlos Salas, galeno del combinado español que asimismo pertenece a los servicios médicos del Real Madrid.

La grave lesión de rodilla sufrida por Sergio Llull en el amistoso ante Bélgica obliga tanto al seleccionador nacional Sergio Scariolo como al entrenador del Real Madrid, Pablo Laso, a recomponer sus esquemas, con la premura del tiempo más en contra del italiano.

El escolta de Mahón estará no menos de seis meses de baja tras romperse el ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha y no volverá a las pistas hasta el año 2018, perdiéndose, sobre todo, el Eurobasket de este verano donde España defiende título.

En un equipo donde casi todo pivota alrededor de Pau Gasol, el menorquín había conseguido convertirse en una pieza clave en la línea exterior y se presentaba como uno de los líderes tras una gran temporada con su equipo, con los galardones de 'MVP' de la Fase Regular de la Liga Endesa y de la Euroliga como principales reconocimientos.

Por ello, y con mucha más experiencia en un combinado en el que era un habitual desde 2009, Llull estaba dispuesto a mantener su nivel en la defensa del título continental, donde iba a ser el '2' titular y no base como había ejercido casi toda la campaña en el Real Madrid tras la marcha de Sergio Rodríguez, lo que le había permitido crecer en otros aspectos como las asistencias.

Ahora, Sergio Scariolo, además de perder una amenaza ofensiva para liberar el poderoso juego interior que lideran los hermanos Gasol, también se queda sin un jugador capaz de ser un gran defensor, por lo que debe encontrar la solución para paliar esta baja.

De los once 'fijos' que citó para el Eurobasket, el italiano ya ha perdido a Mirotic, obligado a renunciar por su futuro en la NBA, y a Llull. Invitó a seis jugadores para pelear por una teórica plaza y ahora el abanico se ha abierto a tres para cinco ya que se ha caído de ese sexteto por lesión Ilimane Diop.

Ahora, la baja del madridista provocará que el seleccionador se quede con pocas opciones en el puesto de escolta, donde el más 'puro' es el veterano Juan Carlos Navarro, que no ha tenido su mejor campaña y que en su último torneo con la selección puede recuperar un protagonismo perdido.

A partir de ahí, hay jugadores que deberán dar un paso adelante. Es el caso de Fernando San Emeterio, ante su gran oportunidad de tener minutos en el combinado nacional donde su papel nunca ha sido importante, principalmente por la presencia de Rudy Fernández.

El siguiente en la lista es Alex Abrines. El balear, que esta campaña ha ganado experiencia en la NBA con Oklahoma City Thunder, reconoció que Scariolo le había pedido más esta campaña y ahora tiene una buena oportunidad. También es buen defensor y es un especialista en el tiro de tres.