Ibiza despidió ayer al trece veces campeón del mundo de motociclismo Ángel Nieto con una emotiva misa en la iglesia de Santa Eulària, municipio donde residía y donde estuvo acompañado por 500 moteros que han hecho rugir sus máquinas en honor de uno de los deportistas españoles más importantes de la historia.

Uno de sus tres hijos, Pablo, indicó que "no van a parar" para estar en todos los homenajes que le rindan a su padre y, como anécdota, ha desvelado que les han llamado para contarles que en Ibiza se han acabado las coronas y las flores de tantas que se han enviado en tributo a Ángel Nieto.

Familiares, amigos y motoristas de Ibiza quisieron acompañar al mediodía a los restos del expiloto en un cortejo fúnebre que ha partido del tanatorio de Ibiza hasta la iglesia del Puig de Missa de Santa Eulària, donde se celebró una misa funeral.

El expiloto falleció el jueves a los 70 años en la Policlínica Nuestra Señora del Rosario de Ibiza, donde estaba ingresado desde el miércoles 26 de julio tras sufrir un accidente cuando conducía un quad.

El cortejo fúnebre estaba encabezado por los hijos mayores del expiloto, Gelete y Pablo Nieto. En la iglesia les esperaban su compañera, Belinda Alonso, y Hugo, el menor de los hijos de Ángel Nieto.

Les han acompañado tambien más de un centenar de familiares y amigos, entre los que se encontraba su sobrino Fonsi y los hermanos del genial piloto.

La emotiva llegada del féretro estuvo acompañada por el rugir de las motos y los aplausos de los asistentes.

Tras la misa, Gelete Nieto ha asegurado que "cada vez está más tranquilo" por "todo el cariño" que está recibiendo su padre. "La gente me está dando una fuerza terrible y yo creo que mi padre, arriba en el cielo, también", ha asegurado.

El cuerpo de Ángel Nietofue incinerado por la tarde en Ibiza y hoy la familia tiene previsto esparcir parte de sus cenizas en el mar.