La Federación Española pagó, mediante un contrato a dedo, 36,5 millones de euros, entre 2009 y 2016, a Estudio 2000 por suministrarle camisetas para árbitros que no se usaban por su mala calidad. Este es uno de los aspectos que investiga Santiago Pedraz. La Federación se habría ahorrado cinco millones de haberlas encargado directamente a la empresa que se las vendía a Estudio 2000.

A cambio de estos contratos, los implicados en la trama cobraban comisiones a través de la empresa de Padrón Tenerife Sport, que cobró entre 2009 y 2011 casi 700.000 euros de Estudio 2000. Además, los investigadores detectaron un ingreso de casi 1 millón de euros en la cuenta de Tenerife Sport de dos empresas de los hermanos Bernad Vico (dueños de Estudio 2000) que se usó para cancelar un préstamo hipotecario de 1,2 millones de euros de Padrón. El juez apuntala sus sospechas de que Tenerife Sport es una empresa creada para cobrar comisiones.

La manipulación del contrato era tan evidente que el propio hijo de Ángel María Villar, Gorka (que manejaba en la sombra la federación), trató el tema en una conversación pinchada del pasado 7 de julio con el presidente de la Federación Cántabra de Fútbol, José Ángel Peláez. "Yo lo sacaría de la ropa y ese contrato me lo cargaría, ¿ya? Yo recuerdo de... es un contrato que además tiene veinte años", dice Gorka, a lo que Peláez responde afirmativamente para añadir que trabajan "con muchísimo retraso" y que se les ha dado un anticipo de 3,6 millones.

Gorka responde que le parece "una vergüenza" y Peláez añade: "La verdad que el que tenga el contrato este... tiene un chollo de putísima madre... tiene garantizado unas ventas de 4 millones y medio de euros... haga lo que haga al precio...al precio que pone, porque los precios, tema de huevos". "Sí, correcto... sí, no... no... no, es una vergüenza lo del contrato ese... ese contrato hay que cargárselo ya... o sea, ya, ya", concluye el hijo de Villar.

Las escuchas policiales en el caso "Soule" también apuntan a que el presidente de la Federación Murciana, José Miguel Monje Carrillo, iba a ser propuesto para un puesto en la UEFA por su apoyo en la reelección del bilbaíno.

Además, Ángel María Villar, "ha concedido beneficios a algunos de los presidentes de las federaciones en cuyo ámbito no tenía asegurado el apoyo", como Madrid, Murcia, Ceuta y Cantabria.

Por otra parte, Gorka y Ángel María Villar conversaron sobre la posibilidad de colocar en la federación a dos asesores de la última candidatura de Villar, Jaume Casas y Jordi Pallarés, y utilizar fondos de la FIFA para pagar sus honorarios.

Otro dato revelado en el auto es que el exsecretario de Estado para el Deporte entre 1987 y 1993, Rafael Cortés Elvira, cobró a través de la sociedad 'Corell' 1,5 millones de euros del Grupo Santa Mónica, vinculado directamente a la trama de "clientelismo" que creó Ángel María Villar.