Aunque ya no es el rostro oficial del Tour de Francia, que ganó en cinco ocasiones, Bernard Hinault sigue siendo una opinión respetada en el pelotón.

- ¿Hay menos emoción en este Tour que en otros?

- Hay un corredor que ha ganado tres veces y que lo normal es que gane un cuarto. El problema es que no tiene muchos adversarios. ¿Quién puede crearle problemas si nadie le ataca o si no se juntan todos los equipos contra él? Desde hace dos o tres años nadie le ataca. Todo el mundo trata de proteger su puesto, temen atacar y perder su posición. Para ganarle hay que atacarle y deben hacerlo todos. Si no, ganará muchos Tours.

- ¿Quintana es su rival?

- En el Giro no le vimos en una gran condición física, puede que se dejara demasiadas fuerzas allí. Lo vamos a ver enseguida, desde la contrarreloj. Son solo 14 kilómetros, pero serán muy significativos.

- ¿Beneficia a Quintana que haya menos contrarreloj?

- Quintana no tenía que haber perdido el Giro, debía haber atacado más y haberle puesto en más problemas a Tom Dumoulin. En el Tour hay una contrarreloj también muy dura el penúltimo día, tendría que llegar con mucha ventaja.

- ¿Y Contador?

- Sin duda es el ciclista que ataca en todos los terrenos, ese es su gran mérito. No espera que sean los otros quienes le allanen el camino. Puede que desde hace dos o tres años no esté en un gran momento de forma, pero siempre hay que contar con él. Tiene la mentalidad del atacante, pero creo que le faltarán piernas a estas alturas de su carrera.

- En la pasada Dauphiné vimos a un gran Richie Porte.

- Pero creo que en carreras de tres semanas siempre le falta un poco de aguante, al final acaba explotando.

- ¿Froome tiene además el mejor equipo?

- Si nadie le ataca no tendrá problemas. Desde la época de Armstrong la mayor parte de los favoritos corren por la segunda plaza, no para ganar. La gente no ataca porque teme perder puntos UCI. Hay que cambiar esa clasificación que bloquea demasiado las cosas.

- En la Vuelta o en el Giro vemos más movimiento...

- Es cierto, pero en el Tour todo el mundo teme perder un puesto, nadie arriesga. Hay que cambiar la mentalidad.

- ¿Está inquieto con la falta de batalla deportiva en las carreras?

- Los espectadores no están contentos. Yo mismo ni me planteo estar 4 horas delante de mi tele para ver algo 45 minutos al final. Basta con ver la última hora. Mucha gente lo ve solo por los paisajes. Los directores deportivos deberían pensar que pierden espectadores y que puede que algún día tengan problemas para encontrar patrocinadores.