Los jugadores del Rápido de Bouzas, en su inmensa felicidad no quisieron olvidarse de quien ha sido un símbolo en la historia del club y que no ha podido disfrutar de este momento legendario para el club que tanto amó: Baltasar Pujales. Después del momento más apasionado de la celebración en el campo, cuando todos saltaban de un lado para otro sin saber con quién abrazarse, los jugadores recordaron a la emblemática figura del expresidente del club y gritaron juntos "Pujales, Pujales, Pujales" con los dedos señalando el cielo. Una lástima que no haya podido vivir este momento delicioso.