El Barcelona será el rival del Obradoiro en la segunda edición del Memorial Quino Salvo, que se disputará en el Central de As Travesas el domingo 3 de septiembre, en un horario aún por concretar. La organización cumple así su promesa de oponer un conjunto de nivel Euroliga a los santiagueses, que en cierto modo ejercen de locales. Los azulgranas regresarán así al parquet vigués tras casi un cuarto de siglo de ausencia.

Fue precisamente el Barça uno de los dos contendientes en el último partido oficial de la máxima categoría que se ha disputado en Vigo hasta la fecha. Sucedió el El 4 de marzo de 1993. El conjunto catalán caía en cuartos de final de la Copa del Rey ante el Tau Vitoria. Aquella edición, que tenía A Coruña como sede principal, la acabaría conquistando el Real Madrid al derrotar en la final al Joventut por 74-71.

Ahora los azulgranas toman el relevo de sus paisanos verdinegros en el Memorial Quino Salvo. El Obradoiro se impuso en la edición del año pasado al Joventut por 77-69. Ese partido, acto último y central de un intenso fin de semana baloncestístico, con torneo para niños y derbi vigués de Liga EBA entre VGO y Seis do Nadal, devolvió el aspecto de sus mejores épocas a las gradas del Central. El éxito de público, bordeando el lleno, animó a la Asociación Quino Salvo a prolongar la existencia de un torneo que había nacido en principio como homenaje puntual al gran jugador y entrenador olívico, fallecido en junio de 2016.

Los miembros de la asociación, que se encargan de todos los detalles de su compleja organización robándole tiempo a sus agendas personales, llevan meses trabajando en la confección del próximo memorial. Desde el principio se plantearon que la continuidad solo tenía sentido si se incrementaba aún más el atractivo del cartel. El objetivo era contar con un conjunto que milite en la Euroliga. El Barcelona fue desde el principio la opción prioritaria. Y la disposición de los responsables azulgranas a participar en el homenaje a Salvo también ha sido excelente. Pero su presencia no ha podido quedar atada hasta hace escasos días debido a todos los cambios que ha experimentado la sección, con la llegada de Nacho Rodríguez como nuevo director de gestión y la sustitución en el banquillo de Bartzokas por Sito Alonso.

El preparador madrileño tiene el complicado reto de recuperar la importancia jerárquica que el equipo barcelonista ha perdido en las últimas temporadas, no ya a manos del Real Madrid, sino superado incluso por Baskonia -que ha hecho mejor Euroliga- y Valencia, flamante campeón liguero. Incluso Gran Canaria (Supercopa) y Unicaja (Eurocup) han logrado título, mientras que el Barça no gana nada desde la Supercopa de 2015. "Nunca puede haber un mal momento para fichar por el Barça. Entre todos podemos hacer que el Barça sea competitivo", aseguraba Sito Alonso hace dos días en su presentación.

Para cumplir con ese plan de resurrección Alonso gestionará una plantilla totalmente renovada. Brad Oleson, Stratos Perperoglou, Alex Renfroe, Xavier Munford y Justin Doellman ya han causado baja. Ayer se conoció que Thomas Heurtel es el primer fichaje. El Central será una de las canchas donde se empiece a alumbrar el nuevo Barça. El viejo pabellón podría además recibir a un mito del baloncesto español, Juan Carlos Navarro. El Memorial Quino Salvo se disputará durante el Eurobasket (entre el 31 de agosto y el 17 de septiembre). Sergio Scariolo revelará a finales de de este mes su preselección, en la que estará con seguridad el escolta. Se duda más de su presencia en la lista definitiva. Si no acude al torneo internacional, podría viajar a Vigo.

La estabilidad del Memorial Quino Salvo depende en gran medida de la repercusión que obtenga esta segunda edición, más allá de cómo acusen el desgaste sus organizadores. La ACB necesita citas de nivel en pretemporada, que escasean.