Jesús Varela ha jugado en Segunda División B con Celta B, Coruxo, Montañeros, Racing de Ferrol, Conquense y Compostela. "Me daba para dedicarme al fútbol al cien por cien", informa. "Pero la vida cambia". Varela regresó a Vigo "buscando estabilidad" y en Tercera "hay que compaginar el deporte con el trabajo para llegar más tranquilos a fin de mes". Tras probar en varias empresas, ahora trabaja en Store Steam, una tienda de cigarrilos electrónicos (lo que se conoce como vapeo). "Estoy muy contento. Es una pequeña familia".

Y sobre ese concepto, el de familia, gira su existencia en los últimos tiempos. El pasado martes nació su primogénito, Mateo. "Estamos ilusionadísimos", dice sobre él y su pareja, Sandra. "Tenemos muchas ganas de que nos cambie la vida a mejor".

La llegada de Mateo enrevesa aún más sus horarios, con el play off en su apogeo, aunque advierte: "Sarna con gusto no pica. Son cosas que te salen de dentro, aunque cuesten un poco. Estoy encantado de que se junte todo y poder compaginarlo. En el trabajo me dan facilidades".

Hasta su hijo ha colaborado. Nació el martes, dos días después del segundo partido contra el Santa Brígida. "Hubiera asistido al parto, claro. Pero Mateo aguantó un poquito". Ya había viajado a Canarias una semana antes tras consultarlo con Sandra. "Por sus sensaciones, estaba tranquila. Y aún no le había bajado el tapón (mucoso); ahora sé muchas cosas de embarazos". En la tienda su compañera aceptó quedarse sola el sábado por la tarde. Jesús viajó solo y llegó a Las Palmas de madrugada. También regresó en un viaje diferente, que el club le buscó. "Todos me han dado facilidades".

Él conoce bien la mayor exigencia de Segunda B, pero es algo que no le inquieta ahora mismo. "Tenemos la ilusión enorme de conseguir algo histórico. Si subimos, ya valoraremos cómo seguir". Cree que Mateo le ayudará: "Dicen que los niños vienen con un pan debajo del brazo; el pan será el ascenso".