Un año sin Joaquín Salvo Pastor, Quino Salvo para el siglo. El vigués, uno de los jugadores y entrenadores más importantes en la historia del baloncesto gallego, falleció el 8 de junio de 2016 a consecuencia de un tumor cerebral. Salvo tuvo tiempo de comprobar la profundidad de su huella en los homenajes que le tributaron en Valladolid, donde es leyenda, y en A Coruña con motivo de la disputa de la Copa del Rey. Los tributos en su ciudad natal han tenido que esperar a su fallecimiento. La primera edición de su memorial, cuyo acto central consistió en un amistoso entre el Obradoiro y el Joventut, bordeó el lleno en el Central de As Travesas. Se trabaja desde hace tiempo en la organización del segundo capítulo.

Los miembros de la Asociación Quino Salvo, creada para honrar su figura e impulsar el baloncesto, depositarán hoy una corona de flores ante la tumba del vigués, en el cementerio de Pereiró. Son días en los que la actividad de la asociación comienza a acelerarse. Mañana presentan el primer campus que lleva el nombre de Quino Salvo. Y conforme se acerca el final de la temporada en la Liga ACB se intensifican los contactos con las diferentes alternativas que existen para que ejerzan de adversario del Obradoiro en la segunda edición del memorial.

El torneo se volverá a disputar en septiembre, aunque la fecha concreta sigue por definirse. La organización ha avanzado además que el rival del conjunto santiagués tendrá distinción de Euroliga. Pero dentro de ese grupo existen diferentes posibilidades. En pocas semanas debería saberse ya el nombre del segundo participantes. La Liga ACB agradece la continuidad de este torneo, toda vez que existen una gran necesidad de citas de pretemporada, siempre complicadas de organizar por cuestiones financieras y de agenda. En cierto modo el memorial es el último servicio que Quino Salvo, a través de sus amigos, le presta al baloncesto español.