La 101ª edición de las 500 Millas de Indianápolis se ha vivido este año bajo una gran expectación. El debut este año de Fernando Alonso en la carrera más emblemática del automovilismo norteamericano ha hecho que el interés en España en la ´Indy 500´ crezca enormemente.

Porque lejos de ser una prueba más, las 500 Millas de Indianápolis es uno de los eventos más esperados en Estados Unidos y se vive como un auténtico show. Tanto es así que la carrera nos deja datos de lo más desorbitantes.

Un autódromo de récord

  • La carrera se celebra en el Indianapolis Motor Speedway, un autódromo de récord ubicado en la capital de Indiana. Este recinto de récord tiene la mayor capacidad de público del mundo, nada más y nada menos que 257.000 plazas.
  • Es un recinto tan grande que desde 1929 cuenta en su interior con un campo de golf de cuatro hoyos. En él se han jugado torneos profesionales del PGA Tour desde 1960 hasta 1968, el LPGA Tour en 1968 y a partir de 2017, y el Champions Tour desde 1994 hasta 2000.
  • Los fanáticos de la carrera consumen en el día de la carrera unos 10.800 kilos de patatas fritas, aproximadamente una cantidad equivalente a lo que pesan dos elefantes adultos.
  • Durante la ´Indy 500´ los espectadores consumen más de 4.500 kilos de carne de hamburguesas.
  • Si pusiéramos en fila india todos los perritos calientes que se venden durante la competición, estos darían la vuelta al circuito tres veces.
  • Con los 1.798 litros de kétchup que se consumen en la carrera se podrían llenar hasta diez bañeras.
  • Las 500 millas de Indianápolis generan un impacto económico en la ciudad de unos 267 millones de euros (más de 300 millones de dólares).
  • Pero la comida no es lo único saciará a los espectadores en ese día. Durante las 500 Millas de Indianápolis se consumen unos 53.000 litros de cerveza y 60.000 litros de Coca-Cola.
  • El trofeo que se lleva a casa el ganador de las 500 Millas de Indianápolis es el Borg Warner, uno de los más codiciados del mundo del deporte. Fabricado en plata, la originalidad de este galardón está en que en su superficie están grabados los rostros de los ganadores de todas las ediciones.
  • Para que nos hagamos una idea de lo descomunal que es el circuito de Indianápolis basta decir que en el interior de su óvalo caben el Coliseo Romano, la Ciudad del Vaticano, el estadio de los Yankees de Nueva York, las pistas de caballos del Derby de Kentucky y el Rose Bowl de Pasadena (un estadio de casi 100.000 espectadores).