Horas después advertir sobre su posible marcha del equipo el año próximo, el español salió a la pista del circuito de Montmeló y, en la primera vuelta, antes de la tercera curva, rompió el motor Honda. No había marcado todavía un tiempo de referencia en la primera sesión de entrenamientos cuando sufrió un trompo por culpa del aceite del propulsor y ahí se quedó. Los comisarios intentaron mover el monoplaza y, al no poder hacerlo, requirieron la ayuda de la grúa para empeorar todavía más la imagen de McLaren: en cuanto el coche se elevó, cayó a chorro el aceite restante del motor.

"El motor explotó ya en la primera curva. Hacerle las preguntas a Honda, no a mí. Es muy duro porque, por más actualizaciones que McLaren trae en cada carrera, no avanzamos, ni siquiera las podemos probar", comentó el piloto a la televisión británica Sky y señaló así que, pese a llevar ya tres averías de motor en sólo cinco carreras, ésta no era una cualquiera. Montmeló, el primer circuito europeo 'clásico' de la temporada, suele ser el lugar escogido por los equipos para presentar las primeras mejoras del año, en ocasiones las más importantes. Este viernes, McLaren proponía algunas ayudas a Alonso, pero es posible que el piloto no llegue a conocer su efecto: en la segunda sesión, el motor volvió a mostrar problemas y acabó último. La preocupación del piloto, eso sí, tampoco era exagerada. Entre la primera y la segunda tanda, el piloto se marchó a jugar al pádel a unas pistas cercana al circuito junto a su fisioterapeuta, Edoardo Bendinelli, y colgó la fotografía en Instagram. Aquello parecía tener algo de provocación, de tomarse un poco a broma la situación. Por la tarde se subió al coche con la sesión ya comenzada y apenas pudo dar una veintena de vueltas y se clasificó en el último puesto de los 22 pilotos que tomaron parte en ella.

A pocos días de marcharse a Estados Unidos a disputar las 500 millas de Indianapolis el próximo domingo 28, Alonso buscara este domingo, como mínimo, acabar una carrera por primera vez este año. En Australia tuvo que abandonar la prueba a cuatro vueltas para el final; en China, en la vuelta 35; en Bahrein, se quedó a una vuelta de alcanzar la meta, su mejor marca este año; y en Sochi ni siquiera pudo tomar la salida.

Fernando Alonso (McLaren) terminó resignado, tras los problemas de motor que le impidieron participar en la sesión matinal de los primeros entrenamientos del GP de España de F1, y confía en dar "un pasito adelante" con vistas a la jornada de calificación de hoy.

El asturiano, que de las cuatro carreras disputadas este año no ha terminado ninguna, padeció una avería en el motor en la primera vuelta y no volvió a entrar en la pista hasta ya iniciada la sesión de la tarde, cuando su equipo ya había solucionado los problemas mecánicos.

"Por la mañana se ha roto el motor, ha gripado en la primera curva y se han bloqueado las ruedas de atrás. Teníamos un agujero en el motor y por ahí perdía todo el aceite. Cambiamos el motor para la segunda sesión y hemos acabado rodando", explicó tras la primera jornada de entrenamientos.

Finalmente, el dos veces campeón del mundo de la F1 completó por la tarde un total de 21 vueltas que, según opinó, fueron "útiles" para "calibrar el nuevo motor".