La mala fortuna se le apareció ayer al Alondras en forma de postes para condenarlo a una derrota ante el Tropezón (2-0) que complica su situación en la lucha por la permanencia. Los de O Morrazo tienen dos puntos de ventaja sobre el descenso pero un calendario complicado en las últimas tres jornadas de competición. El equipo que dirige Javi Tenorio envió hasta cinco balones a la madera y dispuso de numerosas ocasiones para imponerse a un cuadro cántabro que explotó su poderío en el juego aéreo para adelantarse en el marcador en la primera mitad. Antes Dieguito, Anxo y Luky habían tenido el gol en sus botas. En la reanudación los cangueses fueron decididos a por el partido y el técnico hizo tres cambios en el minuto 62. Pero no era el día.