O Gatañal dictará sentencia. El Frigoríficos del Morrazo cayó por 26-23 en la ida de la cuarta eliminatoria de la Copa del Rey ante un Villa de Aranda que supo explotar mejor su acierto en la recta final. La derrota deja un sabor agridulce en una escuadra canguesa que mereció más pero a la que la fortuna le dio la espalda en los momentos decisivos.

Y es que el Cangas completó un partido muy serio en el que solo naufragó en el arranque del segundo tiempo. Hasta entonces supo sufrir en defensa y encontrar buenas soluciones en ataque, si bien no tuvo el día en el lanzamiento. Los palos -hasta cinco balones estrelló en la madera- y Ledo taponaron las opciones morracenses. Con todo, los augurios son positivos para el choque de vuelta, que se disputará el sábado en el pabellón de O Gatañal y en el que habrá que levantar esos tres goles.