El Club Deportivo Amfiv recuerda hoy a su fundador, Pablo Beiro, en el segundo aniversario de su fallecimiento, con una mezcla contradictoria de sentimientos respecto a su presente y futuro: rabia y orgullo por lo sucedido en la Copa del Rey; ilusión por lo que resta de campaña; inquietud respecto al porvenir.

El Amfiv, de plantilla escasa en número, ha tenido una participación brillante en la Copa. Eliminó al Extremadura en cuartos el sábado por la mañana; horas después, tras dominar durante todo el partido, caía ante el poderoso Albacete en el último suspiro con varias decisiones arbitrales polémicas; el domingo conquistaba el tercer puesto a costa del Valladolid.

"Queda el orgullo", destaca el entrenador, César Iglesias. "En el momento de perder sentí bastante rabia. Varias decisiones injustas nos dejaron fuera, sin depender del juego. Pero esa rabia no puede empañar el trabajo y buen juego que hicimos. Vamos a estar peleando por todo en las competiciones que quedan", augura.

El presidente, José Antonio Beiro, de natural fogoso, se muestra esta vez templado. "En principio tuve la pena de no haber llegado a la final. Fue por un tema puramente económico, de profundidad de banquillo. Nosotros estamos muy justos. Cuando pasan diez minutos te sientes orgulloso por todo lo contrario. Teniendo tres veces menos presupuesto que Albacete, le hemos peleado el partido y hemos quedado terceros. Es lo único a lo que podemos aspirar en España. Ilunion y Albacete están muy por encima del resto. Su objetivo es quedar campeones de Europa. Han protagonizado las tres últimas finales de Copa y Liga", recuerda.

El mandatario añade: "Cuando acaba, todo el mundo nos dice: 'Las decisiones arbitrales os han matado'. Pero también veo cuatro pérdidas en momentos clave o que hemos luchado contra un gigante. Es un cúmulo. Quedarnos en las decisiones arbitrales es complicado. Pero sí protesté antes del partido y no me parece lógico que las semifinales las piten dos árbitros sin experiencia en División de Honor en España, donde más árbitros internacionales hay".

Ambos agradecen especialmente que el equipo se repusiese del disgusto de semifinales para lograr la medalla de bronce. "Es la buena química, esa cohesión del grupo que hace que disfrutemos jugando", argumenta Iglesias.

Beiro echa cuentas y la aritmética retrata la gesta del Amfiv. El equipo viqués, que marcha también tercero en la Liga, no supera los 130.000 euros de presupuesto. Dinero del que también se nutren el filial y las escuelas deportivas, además de actividades como las visitas a 40 colegios cada curso. Con este material plantan cara a clubes que centran sus gastos en la élite: Ilunion (350.000 euros), Albacete (300.000), Valladolid (210.000), Bilbao (alrededor de 200.000), Canarias (cerca de 190.000)...

Así, mientras el entrenador del Albacete rotaba a sus catorce jugadores y el entrenador del Ilunion se dedicaba a elaborar convocatorias para cada cita, César Iglesias necesitaba exprimir a sus ocho efectivos. "A un partido le puedes ganar a cualquiera, pero el cansancio no es el mismo para unos que para otros", valora el técnico vigués. "El formato, con dos partidos en un día, nos mata. Pero se trata de competir al máximo. Jugando a ese límite estamos al nivel de los mejores".

La competición se detiene ahora dos semanas. Iglesias ha dado siete días de vacaciones a sus jugadores. Después realizará una minipretemporada. Les repone así las energías "físicas y mentales". El Amfiv se exige el máximo en el torneo doméstico y sueña además con ganar el primer título de su historia en la Challenge Cup, que organiza en abril. El 12 de marzo conocerá a sus rivales tras la fase previa continental.

Aunque la Challenge incremente incluso la carga de partidos -cinco en tres días-, Iglesias no teme un desfallecimiento como el que pudo sufrir ante Albacete. "Con un nivel un poco más bajo podemos ampliar la rotación. El que más me preocupaba es Chava, tiene 42 años, pero ante el Valladolid fue el que mejor rindió, finalizando contraataques. Yo alucinaba. Un diez para el trabajo físico de Noelia y Pablo. Ojalá lleguemos a esa Challenge en estado óptimo. Y un sistema de grupos también puede cambiar el planteamiento".

Beiro disfruta del momento. Es lo que distingue en el horizonte lo que le nubla el ceño. "El club necesita en el próximo año y medio una solución. Ahora mismo no podemos soportar esto más allá de ese plazo. O aparece un patrocinador, o un grupo de patrocinadores que nos ayuden, o no podemos seguir con el Amfiv como lo conocemos a día de hoy. Estamos gastando un dinero que no tenemos", aclara.

La entidad siempre se ha caracterizado por su seriedad económica. De esa política no se mueve ni un ápice. Pero la expansión de su actividad ha obligado a tirar de ahorros, que son finitos. "El único equipo que no tiene patrocinador en División de Honor somos nosotros. Llega un momento que no puedes", reflexiona. "Si me cargo el filial, mando a 18 personas para casa; si me cargo las escuelas, mando a 38; si me quedo solo con el primer equipo, me olvido de la historia de este club; si dejo morir al primer equipo, me cargo el resto. Es una disyuntiva complicada, un problema gordo". No tira la toalla y la directiva ya prepara una campaña que le permita encontrar ese sostén.