El entrenador del Sporting, Joan Francésc Ferrer, Rubi, afirmó que la victoria de su equipo ante el Celta, con el que empató a un gol, "se va al traste por la falta de eficacia arriba" e ironizó diciendo que esperaba "poder sumar los tres puntos jugando mal".

"No haber sumado más que un punto tras dos buenos partidos no tiene que afectar a los jugadores. Estamos jugando bien y siendo superiores a los rivales. Ese es el camino a seguir", aseguró.

El técnico del equipo gijonés lamentó el gol encajado, ya que "es un error grave, no se pueden encajar goles así", proclamó al referirse a que Aspas aprovechó el salto de la barrera en el lanzamiento de una falta directa para superar a Cuéllar.

El Sporting juega el miércoles ante el Barcelona en la que "será una faena difícil", según Rubi, que también afirmó que a pesar de todo irán a tratar de lograr algo positivo. Después recibirá al Deportivo de A Coruña, con el que se jugará un puesto de descenso.

Para el entrenador del Sporting "tanto ante el Atlético de Madrid como ayer frente al Celta se jugaron dos buenos partidos, aunque la diferencia es que hoy se crearon más ocasiones de gol", pero sin resultados positivos porque unas veces las interceptó el guardameta céltico Rubén Blanco y otras porque se marcharon fuera o se estrellaron en el palo, como un remate de cabeza de Traoré.

"Es cuestión de encadenar partidos, mantener esta línea y contar con esta afición", añadió Rubi para insuflar nuevos ánimos a un equipo que desperdició otra buena ocasión para meter a otros rivales, como el Deportivo o el Leganés, en la pelea por la permanencia, en la que los gijoneses siguen involucrados junto a Granada y a Osasuna.