Eduardo Berizzo mantendrá esta tarde frente a Osasuna el plan de ataque de los últimos partidos, pero confía en que su equipo mejore la pobre pegada que ha tenido en este mes de febrero y logre un triunfo importante para no perder comba con los puestos altos de la tabla.
"La idea es la de siempre: salir a ganar a través del balón, teniéndolo mucho, recuperándolo pronto y moviéndolo de lado a lado con inteligencia e intensidad para encontrar las mejores opciones de ataque. Debemos ajustar nuestro ataque, tener ocasiones más claras y afinar bien la puntería", apuntó el entrenador del Celta tras el entrenamiento matinal celebrado ayer en A Madroa.
El entrenador celeste anunció rotaciones ante los rojillos con vistas al duelo europeo del próximo jueves en Ucrania. Pierde a Hugo Mallo y Guidetti por lesión, da descanso a Pablo Hernández y a Roncaglia y preserva a Iago Aspas, aunque el moañés estará en el banquillo y podría tener minutos si fuese necesario. "Hemos evaluado algunos casos porque el desgaste del otro día significó una mejor puesta a punto para algunos. Jugar mucho es bueno en algunos casos, como los que podrían repetir como Radoja, que está suspendido,o Wass, que viene de un descanso", desveló.
El Toto Berizzo no se fía de la urgencia con que el rival afronta el choque y recordó que Osasuna ha mejorado considerablemente su rendimiento desde que el serbio Petar Vasiljefic se ha hecho cargo del banquillo. "Osasuna es un rival que ha reaccionado y ha encontrado mayor solidez de la que tenía y ha hecho buenos partidos contra el Madrid y el Valencia en el último tramo. Tiene futbolistas de oficio que nos van a exigir un ejercicio de ataque continuo, ajustado, imaginativo y no exponernos a la peligrosidad de una contra", explicó.
No se mostró el preparador céltico preocupado por los malos resultados del equipo, que encadena en este mes de febrero cuatro partidos sin ganar, un problema que Berizzo achaca más a la falta de puntería que al juego.
"No creo que la confianza haya bajado. La preocupación tiene que ver con la puntería. Creamos suficientes ocasiones pero tenernos que serenarnos en el momento clave, que es la ejecución", apuntó. "El otro día podíamos haber ganado el partido dos o tres a uno. Debemos corregir la portería pero el equipo siempre va al frente, lo da todo y eso me da mucha confianza de cara a lo que viene", añadió.
Berizzo observó, en este sentido, que el equipo solo ha estado por debajo de su nivel en el encuentro de vuelta de la semifinal de Copa. "Hay que saber reconocer lo que sucede dentro de los partidos. Jugamos un mal partido en Vitoria pero los demás han sido buenos, si hablamos de producción. El comportamiento del equipo fue el esperado. En un partido de la Europa League no hay cincuenta ocasiones de gol, sino tres, y esas tres las pudimos meter. Luego cometimos el error de la pelota detenida", opinó. Y agregó: "Estaría preocupado si los trámites hubiesen sido totalmente adversos y nos hubiésemos apartado de nuestra forma de jugar. Como eso no sucede, podemos mirar al futuro con deseo. Venimos de tres derrotas pero eso nos hace más duros. Nuestra capacidad de reacción es admirable".
El entrenador del Celta restó importancia al hecho de que Aspas, que presumiblemente iniciará el choque en el banquillo, lleve seis jornadas sin marcar. Berizzo entiende que sería "saludable" que la responsabilidad goleadora no recayera toda en artillero moañés, al que ve "más peligroso" como extremo que como delantero centro: "Cuando lidia con dos centrales tiene más dificultad de generar peligro que partiendo desde la banda".
El preparador celeste confirmó, por otra parte, la vuelta de Rubén Blanco a la portería, anunció el debut del danés Andrew Hjulsager y expresó su satisfacción por la plena recuperación del Claudio Beauvue, "un jugador muy valioso", al que ve pronto jugando.
