El presidente de LaLiga, Javier Tebas, aseguró ayer que mantuvo varias conversaciones con el Real Madrid tras suspenderse el partido que ante el Celta en el estadio de Balaídos. El dirigente avaló la decisión del Concello de Vigo, restó importancia al hecho de suspender un partido y dejó ver que efectivanente existieron presiones por parte del Real Madrid.

"Si hubiesen caído cuatro gotas, vale, pero es que no era un chirimiri como parecía creer más de uno. Alguno dijo que era poca cosa y que lo arreglaba en diez minutos. Y no. Era un clima huracanado", dijo Tebas en este acto.

"Tuve que explicarle a mucha gente en qué causas se podía suspender un partido. El Real Madrid quería que se jugase y hubo que aclarar por qué no se podía jugar. Fue una tarde muy larga, que cuando deje esto del fútbol, ocupará todo un capítulo de un libro que estoy escribiendo", añadió el presidente de la Liga, que incluso reveló que el Madrid propuso que se jugase el encuentro en Portugal.

Cuestionado sobre si el presidente del Real Madrid, Florentino Pérez, presionó para que se jugase el partido, Tebas tiró de ironía. "¿Florentino? No, los que me presionaron fueron unos familiares míos que tenía en casa", bromeó.

Además, señaló que no se le puede echar el problema al estado del estadio de Balaídos porque había vientos huracanados en toda Galicia y el mismo vio fotos donde se veía "una torre de alta tensión doblada y muros que se habían caído". "Si hubiesen caído cuatro gotas, estaríamos de acuerdo todos. Y para muchos parece que aquello no fue nada", indicó.

"No podemos decir que los estadios están mal y no podemos tomar ninguna medida. Solo tenemos que seguir como lo están haciendo los clubes, mejorando sus estadios. También tenemos que poner más conectividad para que los 'millenials' no dejen de ir a los campos", agregó.

Por otro lado, sobre el comunicado que emitió el Real Madrid, en el que lamentó las "desafortunadas" declaraciones del alcalde de Vigo, Abel Caballero, explicó que el conjunto blanco "puede tener algo de razón", pero que él no hubiese actuado de "una forma tan drástica como ha hecho" el equipo de Chamartín.

"Cuando salimos de nuestras fronteras, los aficionados no son como nosotros. No es bueno que se suspenda un partido por el tiempo, pero afectan otras cosas más y en la Premier League también pasa. Es una pena que se haya volado la cubierta, pero eran vientos huracanados y no por ello podemos decir que estuviese en malas condiciones", añadió.

El presidente de LaLiga afirmó que no sabe cuándo se jugará el encuentro entre el Celta y el Real Madrid porque no es una decisión que le corresponda al organismo que dirige, pero que propondrán "varias fechas" a la Real Federación Española de Fútbol (RFEF).