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Cinco 'grandes' del Celta: "Merecemos una Copa"

Cinco jugadores que disputaron con el Celta semifinales coperas creen que el club está ante su gran oportunidad de acabar con su sequía histórica - Advier ten del peligro del Alavés al que consideran un "un equipo enorme"

Ratkovic, Manolo, Patxi Salinas, Lezcano y Otero, ayer en Balaídos. // Alba Villar

"No hay nada como vivir una final de Copa para un equipo como éste". Lo dicen Ratkovic, Salinas y Otero que estuvieron en la final de 1994 en el Calderón tras superar aquel apasionante duelo contra el Tenerife. Ellos son de los exjugadores del Celta que pueden hablar de lo que supone superar ese penúltimo y costosísimo peldaño que es una semifinal y en la que a lo largo de la historia han quedado enterradas tantas esperanzas. Diferentes generaciones del club vigués se vieron en ellas y muy pocas fueron capaces de conseguirlo. Manolo, Gabriel Lezcano, Patxi Salinas, Jorge Otero y Milotad Ratkovic se reunieron ayer para recordar sus experiencias y para analizar el duelo que arranca mañana en Balaídos ante el Alavés. Se expresan con nostalgia por lo vivivo, pero con enorme esperanza por lo que está por venir.

Manolo, el Gran Capitán, solo vivió una semifinal con el Celta. Sucedió en su segunda temporada en el club (1967-68) y con un equipo en Segunda División se plantaron en semifinales ante el Real Madrid después de liquidar a varios equipos de Primera: "Fue una gran experiencia porque además estábamos ganando 3-1 en la ida y recibimos el segundo gol en el último minuto. Una pena porque podíamos haber ido a la vuelta con un resultado mejor. Luego allí fueron mejores y remontaron para clasificarse para la final". El central estaba en aquel momento en pleno servicio militar y recuerda que "tuve un encontronazo con Canario, no se podían hacer los cambios, y eso me dejó algo mermado....una lástima, pero la experiencia fue muy bonita". Curiosamente luego el Celta ascendió a Primera, fortaleció su plantilla a comienzos de los setenta, se clasificó para Europa, pero aquella generación ya no fue capaz de volver a una semifinal: "Eso da una idea de lo complicado que es, de lo difícil que resulta la competición".

Manolo confía en que el jueves el Celta dé el primer paso hacia la cuarta final de su historia. Advierte del potencial del Alavés "que ya demostró hace pocas semanas en el partido de Liga en Balaídos" pero también tiene claro que "si el Celta mantiene la línea de los últimos meses creo que debe estar en la final. Pero sin olvidar que el Alavés es un equipo duro, difícil de ganar que ha llegado ahí por algo".

En aquella misma semifinal de 1968 estuvo Gabriel Lezcano. El futbolista de origen paraguayo aún tiene fresca aquella eliminación ante el Real Madrid: "Sufrieron mucho. Nos marcaron al final del partido en Vigo y luego en Madrid también les dimos trabajo. Pero eran el Real Madrid..." Tiene claro Lezcano que el Celta de Berizzo no puede desaprovechar una ocasión como la que se le presenta en estos momentos para volver a pisar una final: "Todos nos alegramos después del sorteo por el hecho de evitar al Atlético y al Barcelona, pero no podemos olvidarnos de que es un equipo al que cuesta mucho hacer un gol, que están firmando una gran temporada. Habrá que superarles en fútbol, pero también en pelea y en ganas".

Más jóvenes y también expertos en semifinales coperas son Salinas, Otero y Ratkovic. Los tres vivieron la experiencia de 1994 que acabaría en la final del Calderón; el vasco y el serbio también estuvieron en el duelo contra el Betis de 1997 que les dejó a las puertas de otro nuevo duelo por el trofeo. Su recuerdo es más fresco. Ven la actual temporada como un momento ideal para romper con esa sequía histórica que acompaña al Celta desde su nacimiento.

Jorge Otero recuerda que "nadie imaginaba que un equipo como aquel iba a alcanzar una final. El Tenerife era uno de los grandes equipos de aquel tiempo y eran los grandes favoritos. Tuvo mucho mérito competir como lo hicimos, ganar de aquella manera en el partido de ida en Balaídos (3-0) y resistir luego en Tenerife. Fue el resultado de tener un equipo como aquel. Esa frase de que la unión hace la fuerza se hacía evidente en aquel vestuario", resume el actual entrenador del Arosa. Apunta Ratkovic en ese sentido que "ellos venían de eliminar al Real Madrid y se veían en la final, pero hicimos un trabajo fenomenal". El Celta resistió aquel partido de vuelta tras ponerse 2-0 abajo. Explica Otero que "vimos la luz al final del túnel con el primer gol de Gudelj, pero creo que el resultado de la eliminatoria fue merecido". Y apunta Ratkovic "2-0 y un remate al travesaño que aún debe estar temblando la portería". Salinas sonríe al escuchar la palabra Tenerife: "Yo me acuerdo del sufrimiento en el campo, pero también de la alegría de aquel vestuario y de la llegada apoteósica a Peinador".

Los tres avisan de las complicaciones que pondrá el Alavés. Otero explica que "después del sorteo te pones contento, pero la verdad es que ves el partido del sábado pásado entre el Alavés y el Atlético y te entran dudas de cuál es más complicado de los dos. Es un equipo que domina el juego, con muy buenos futbolistas, con mucha confianza".

Tiene claro el antiguo lateral que "el Alavés tratará de aprovecharse de la tendencia del Celta de ir hacia arriba. Es necesario tener mucho cuidado de no desconectarse porque tienen mucho peligro a la contra y tratarán de aprovechar de los pocos descuidos que tengamos". Coincidencia general de que "lo que suceda en Balaídos no va a ser definitivo. En Vitoria estará el pase a la final".

Milorad Ratkovic también se deshace en elogios con el Alavés porque "es un equipo que ha plantado cara a conjuntos importantes y se ha visto ante el Atlético que son capaces de hacer cosas interesantes. Aquí nos plantearon dificultades pese a quedarse con uno menos. Es un equipo rocoso, muy agresivo, difícil de batir...pero con el equipo que tenemos podemos superar la eliminatoria. Pero siempre teniendo claro que va a ser muy duro".

Tiene claro el serbio que "ellos jugarán manteniendo más la portería propia que atacando la contraria. Eso llevará a asumir un riesgo. Si conseguimos un buen resultado, creo que será más fácil jugar en su campo que en el nuestro. No veo un gran problema si somos capaces de ganar la ida porque me parece que va a ser más difícil jugar con ellos en Balaídos".

También Salinas se suma a la oleada de piropos al Alavés: "Todos le queríamos en el sorteo, pero en Liga me causaron una impresión espectacular. No me esperaba que fuesen tan buenos".

El entrenador del Rápido está convencido de que la eliminatoria está muy igualada pero que el Celta debe hacer valer su mayor cantidad de recursos: "Está haciendo una temporada para quitarse el sombrero, pero creo que el Celta tiene algo más..."

A Salinas le gustaba la idea de jugar la vuelta en Balaídos porque "al final es tu ambiente, tu campo y te puedes agarrar a eso en la vuelta independientemente de lo que haya sucedido en la ida. Pero también tengo claro que el Celta juega tan bien en casa como fuera y eso es importante. Tienen claro cómo jugar, su idea está muy definida y no debe tener miedo después de haber sido capaz de ganar en campos muy complicados".

Tampoco espera un Celta excesivamente prudente: "La ocasión es histórica. Este equipo no sabe hacerlo, no es la clase de conjunto que sale a esperar. Berizzo irá a muerte, valiente, agresivo, con una sexta velocidad...

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