La lógica decía que el Vgo Basket partía como claro favorito ante el Seis do Nadal en el derbi vigués, pero la realidad fue que los colegiales vendieron muy cara su derrota, y los jugadores del Vgo solamente pudieron respirar tranquilos en los minutos finales del partido.

El partido no fue vistoso. Los dos equipos necesitaban la victoria como agua de mayo. El Vgo para meterse de lleno en la pelea por la salvación, y los colegiales por acabar con un maleficio que dura más de la cuenta.

Los primeros diez minutos de juego reflejaron lo que se podía esperar del encuentro. Excesiva responsabilidad en ambos equipos, que se preocuparon de defender más que de atacar. Las defensas en zona predominaron durante muchos minutos, lo que provocó numerosas pérdidas de balón y numerosos errores en los lanzamientos. De hecho, tras siete minutos de juego, el marcador reflejaba un parcial de 4-4.

Las cosas mejoraron en el segundo cuarto, en donde los dos equipos estuvieron mucho más activos en ataque. El Vgo siempre estaba por delante en el marcador, pero no conseguía diferencias importantes, ya que le costaba mantener el ritmo. Todo lo contrario del Seis do Nadal, que limitado en lo que a efectivos se refiere se resistía a que el cuadro local sentenciara el encuentro, con una buena aportación de Óscar García y Marcos de la Fuente.

Tras el paso por el vestuario parecía que el Vgo sentenciaba el partido al ancanzar nueve puntos de ventaja con una canasta de Murphy, pero en ese momento volvió a aparecer la falta de continuidad del equipo, que encajaron un parcial de 2-8 con lo que las cosas volvieron a su sitio y mediado el cuarto el Vgo vencía por solo tres puntos, 31-28.

Fueron cinco minutos en donde el Seis do Nadal se resistía a morir. Los dos equipos echaron mano de las defensas en zona para frenar al rival, y las diferencias nunca superaban los cinco puntos para el Vgo Basket.

El último periodo comenzó con el cuadro local mandando en el marcador por siete puntos de diferencia tras una canasta de dos puntos de Alejandro Castells. Fue un punto de inflexión en el partido pues el Seis do Nadal comenzó a acusar el desgaste físico y bajó la intensidad. Al equipo le costaba bajar a defender, mientras que el fondo de armario del Vgo Basket le permitió dar el estirón que, a la postre, sería definitiva.

Mediado el cuarto, el marcador apenas se había movido, 7-2, pero las dinámicas de los dos equipos ya era completamente diferente. El desgaste le pasó factura al equipo entrenado por Sergio González que, además, perdía efectivos por faltas personales en una plantilla muy limitada de efectivos.

En Vgo fue poco a poco aumentando su ventaja ante un Seis do Nadal que ya nada pudo hacer por frenar a su rival, tratando por lo menos de encajar una derrota por la mejor diferencia posible.

De momento el Vgo se corona como mejor equipo masculino de la ciudad, pero todavía queda toda la segunda vuelta por delante, con un claro objetivo, lograr la permanencia.