Increíble. El campeón olímpico Dinamarca y el campeón de Europa Alemania se han quedado fuera en octavos de final. Humildad. Es clave en 60 minutos de un partido. España estuvo en la UVI durante mucho tiempo pero una exclusión de Toledo en el partido ante Brasil nos dio sangre en vena y con un parcial de 0-2 logramos meternos en cuartos. Dinamarca estuvo todo el partido perdiendo contra Hungría. Logró empatar a falta de cinco minutos, pero para ganar los partidos hay que ponerse delante. Cuando se dieron cuenta estaban fuera del Mundial. Con un 6-2 fácil 6-2, creyó que ya estaba en cuatros, pero el entrenador alemán no sabía que en el banquillo de Catar estaba Valero Rivera, que trató de sorprender en 5:1 con Capote de avanzado. Se da cuenta del error y modifica a 6:0. Rectificar es de sabios. El seleccionador alemán, mucho protestar, pero en los últimos minutos estuvo sentado en una esquina en el banquillo.
Fórmula de competición. En un Europeo, en la segunda fase, te vas con los puntos acumulados de la primera. Y siempre tienes opción de mejorar y seguir. En un Mundial te la juegas en los cruces y en octavos te puedes quedar fuera. ¿Quién se pone a ver la Copa Federación jugando Angola, Arabia Saudí, Japón, Chile, etc.? Sin menospreciar a ninguna selección, pero es un Mundial.
Porteros. La importancia que tienen en balonmano. Corrales nos salvó posiblemente de irnos para casa. Omeyer (Francia) cierra la portería y los galos juegan tranquilos. Mikled mete a Hungría en los cuartos de final. Saric, una medalla de plata en el anterior Mundial, y ahora en cuatros con Catar. Wolf (Alemania), con un 47 por cien de paradas, no fue capaz de evitar la eliminación de su selección.
Defensa. Prácticamente todos los equipos defienden en 6:0. Una defensa donde predominan las salidas hasta nueve, diez e incluso once metros de los cuatro jugadores de la zona central. Incluso en muchas de las defensas los dos centrales están escalonados, trastocándola a una defensa 5:1 cerrada. Antes veíamos las defensas 3:2:1 yugoslava, la 5:1 con Vori (Croacia). Guille con Francia cerradita y bajando a 6:0 en los desdoblamientos. Ahora las defensas 6:0 habituales casi son una mezcla de estas grandes defensas. Los centrales ahora, aún siendo altos y fuertes, tienen mucha velocidad. Antes solo hacían desplazamientos laterales y blocajes.
Velocidad. Toda las selecciones corren en primera y segunda oleada de contraataque. La velocidad es fundamental. Tanto en defensa como en la transición defensa-ataque. Cuidado. Aún ahora se ve en las categorías base a los entrenadores mandando parar los contraataques por el miedo de perder el balón. Por favor, no cometáis ese error. Dejad a los niños que corran. Trabajad pases, la recepción, el desmarque, pero dejad que corran y que disfruten.
Reglamento. No se puede ver a un jugador de campo de portero por culpa de un reglamento desequilibrado. En las rojas a los porteros el reglamento es claro: Mikled, el portero húngaro tenía que haberse ido con roja y podía desequilibrar un partido. Parece que los árbitros siguen sin saber cuándo es falta en ataque o penalti.
Lo peor del Mundial. El juego con siete. Las selecciones no lo tienen preparado y es desagradable ver las porterías vacías. Ahora son eliminatorias y ya se ve menos, a excepción de cuando están con uno menos.
Entrenadores. Jordi Ribera con España, Javier Sabaté con Hungría y Valero Rivera con Catar están en cuartos. Veselin Vujovic, de Eslovenia, estuvo muchos años como jugador y entrenador en España; Didier Dinart (Francia) sigue viviendo en Ciudad Real y también muchos años en nuestro país ganando títulos como jugador en el Ciudad Real. Y porque las selecciones de Ortega y Garralda son flojas.
Ahora nos espera Croacia. Cuidado porque son ganadores natos y a un partido son muy peligrosos. Su central Cindric y su lateral Duvnjak, junto con su portero Pesic, son los más peligrosos del equipo. Tenemos otra vez la oportunidad de poder llegar a una final. Suerte.
