Centenar y medio de incondicionales se acercaron esta mañana a las instalaciones deportivas de A Madroa aprovechando la jornada de puertas abiertas programada por Eduardo Berizzo para arropar al Celta tras su contundente victoria copera ante el Valencia y felicitar al equipo celeste por el gran partido firmado en Mestalla en vísperas de la visita del Málaga a Balaídos en la Liga. Los aficionados, entre los que se contaban muchos escolares de vacaciones, corearon el nombre de sus héroes, especialmente de Aspas, Sergio y Guidetti, y vibraron con las evoluciones de los futbolistas sobre el campo de entrenamiento.

La sesión fue la habitual tras un partido, suave para los titulares la víspera, y bastante más intensa para los suplentes. Radoja y Pablo Hernández, más cargados muscularmente que el resto, trabajaron aparte en el gimnasio, lo mismo que Carles Planas, que continúa trabajando en la recuperación de su lesión. Orellana, mientras, realizó trabajo de campo al margen del grupo con buenas perspectivas entrar en la convocatoria para el compromiso liguero del domingo.

Tras el entrenamiento, los jugadores firmaron autógrafos y se fotografiaron con los aficionados.