Bilbao Basket rompió su racha de tres derrotas con un triunfo en Santiago que le permite seguir soñando con la Copa del Rey, en un partido en el que su acierto desde el perímetro (15/32, 46 por ciento) destrozó al conjunto gallego.

Con cuatro triples en apenas seis minutos, el Bilbao Basket dominó en el arranque (2-15, 6-18) hasta que el Obradoiro ajustó su defensa y solucionó sus problemas en ataque buscando a Pustovyi -13 puntos en el primer cuarto-. El Bilbao pegó un estirón gracias a su acierto en los triples (22-28, min.14). Ahí estuvo la diferencia. El Obradoiro, apoyado en su intensidad defensiva, culminó su remontada (28-28, 33-33) pero el acierto exterior oxigenó otra vez al equipo de Durán (35-43, descanso).

En el arranque del segundo periodo, coincidiendo con la vuelta a pista de un Pustovyi que no jugó en el segundo cuarto castigado por las faltas, el conjunto santiagués apretó el marcador (43-47, min.24). Durán paró el choque. Y su equipo despertó con un parcial 2-7 (45-54, min.25). Con esa renta jugó el Bilbao Basket hasta el último cuarto.

El entrenador del Obradoiro ordenó de salida una defensa en zona y su rival lo destrozó con otro triple. Y, tras una rigurosa falta técnica a Llovet por simular una falta en ataque, el Bilbao se puso 15 arriba (56-71). El Obradoiro no se entregó y en el último minuto dispuso de un ataque para situarse a tiro de un triple pero Bendzius erró su bandeja (74-79).